Puerta a las Bardenas y mucho más
Si algo tiene de extraordinario éste pueblo ribero del sur de Navarra son sus gentes entre las que podrás ser uno más, el entorno natural que lo rodea de una gran belleza, contraste y singularidad y sus casa-cuevas excavadas en el monte y que sirvió de cobijo a sus habitantes hasta bien entrado el año 1965.
Pero, caminemos despacio no vaya a ser que con las prisas nos perdamos aquello que precisa de un acercamiento más lento y placentero… aquí hay más de un camino por recorrer.
Esta localidad, eminentemente agrícola está convirtiéndose en uno de los principales focos de atracción turística rural de Navarra ¿Será por la riqueza de sus contrastes? ¿ Por la diversidad de su entorno? ¿ Será porque aquí como me dijo hace poco una chica francesa, la gente es cercana y sencilla, te sientes arropada?
Arguedas ha crecido entre: la Serranía del Yugo y el Parque Natural de Bardenas Reales con sus páramos semidesérticos y secos; y la prolífica ribera del Ebro que con sus aguas riega los sotos y campos que tan excelente huerta nos proporciona, por lo que disfrutar de sus vistas, de su entorno natural y de una buena gastronomía está asegurado.
¿Cómo es posible en tan pocos kilómetros que el romero, el tomillo y el cereal de secano convivan con los arrozales inundados donde las cigüeñas mojan sus patas al atardecer ofreciéndonos una imagen espectacular?
Así es, Arguedas con la belleza de su entorno natural ofrece a sus visitantes múltiples rutas para pasear y descubrirla. En sus inmediaciones puedes visitar la Sierra del Yugo con sus excelentes panorámicas y la ermita de la Virgen del Yugo; el parque de naturaleza y diversión Sendaviva, el parque Natural de Bardenas Reales, sus arrozales del Raso y Murillo, así como los Sotos del Ebro y el río. Ya en el casco urbano, otros recorridos más cortos te llevarán a Las Cuevas de Arguedas, cuevas-casa excavadas en “La Peña” nombre por el que se conoce el monte que da cobijo al pueblo; podrás subir al “Balconico de los Moros” desde donde verás una magnífica panorámica de la localidad y sus campos, o pasear por el Paseo del Bordón que recorre la población de un extremo al otro…
Pero sobretodo podrás ser uno más entre nosotros, disfrutando de tu descanso mientras te tomas un buen pincho, una buena comida o un sencillo café.
